El Principado dio su visto bueno a una prórroga de cuatro meses para una obra que debía haberse completado en mayo
07.07.11 - 02:39 - IVÁN VILLAR | GIJÓN.
Las obras del Palacio de Justicia se prolongarán hasta septiembre, según confirmaron fuentes de la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad. El presidente en funciones, Vicente Álvarez Areces, colocó en diciembre de 2008 la primera piedra de una obra para la que se establecía como plazo máximo de ejecución 24 meses. Entonces se mostró convencido de que «las empresas, como siempre hacen, cumplirán los plazos y en esa fecha estaremos inaugurando el Palacio de Justicia». El contrato firmado con las constructoras Dragados y Coprosa, no obstante, fijó mayo de 2011 como fecha de entrega, dando así cinco meses más de margen para su conclusión. Vencido este plazo, el Principado ha dado su visto bueno a una prórroga de cuatro meses solicitada por las constructoras, que ahora tienen hasta septiembre para completar los trabajos. Habrá que esperar por tanto a que finalice el verano para poder inaugurar el equipamiento, pese a que la intención el Gobierno en funciones era hacerlo antes de que concluyera su mandato.
En cualquier caso, su entrada en funcionamiento se postergará aún más allá, ya que esta fecha corresponde tan sólo a la del final de la obra del edificio. Quedará pendiente aún la instalación del mobiliario -cuya adquisición ya está en trámite- y el traslado de archivos y demás material desde los juzgados actualmente en servicio. La actividad judicial en la nueva sede, por lo tanto, no comenzará, como muy pronto, hasta finales de año o incluso comienzos de 2012. Actualmente, los trabajos se centran en la impermeabilización de los patios interiores, la conclusión de los pavimentos de mármol y los suelos técnicos y el remate de las instalaciones eléctricas, de climatización, de iluminación y demás.
El Palacio de Justicia de La Bohemia se levanta sobre una parcela de 8.000 metros cuadrados y sus seis plantas -dos de ellas bajo rasante- suman 23.000 metros cuadrados construidos, espacio suficiente para acoger todos los juzgados que hay en funcionamiento en Gijón y que actualmente están dispersos en cuatro sedes diferentes: Poniente, Prendes Pando, Donato Argüelles y Carretera Vizcaína. A la planta baja, que aglutinará los servicios más comunes abiertos al público general, se accederá a través de un gran vestíbulo que hará las veces de distribuidor. Desde ahí se podrá llegar de forma directa al registro civil, a la sala de bodas -para acceder a estas dos estancias no será preciso superar los controles de seguridad-, al juzgado de guardia o a la oficina de asistencia a las víctimas. También será la entrada a las salas de vistas y la clínica médico-forense.
La primera planta estará copada principalmente por los espacios destinados a los Servicios Comunes de Ordenación del Procedimiento e incluirá un amplio espacio de reserva para necesidades futuras. También se reservará para ampliaciones adicionales de la planta judicial parte de la segunda planta, en la que se instalarán además la Fiscalía y la Audiencia Provincial, así como la Unidad Técnica de Gestión, el Decanato y los colegios profesionales, entre otros. Finalmente en la planta superior tendrán cabida las dependencias de los juzgados de Primera Instancia, de lo Penal, de Instrucción, de lo Contencioso-Administrativo y de lo Social.
Los profesionales, comprensivos
A pesar de la continua espera para poder disfrutar del nuevo equipamiento judicial de la ciudad, largamente demandado, los profesionales de la Justicia se muestran comprensivos con los cambios de calendario que ha sufrido la obra y destacan que, hasta el momento, el Principado les ha tenido en todo momento al tanto del avance de los trabajos. Es el caso de la decana del Colegio de Procuradores de Gijón, Ana Belderrain, quien asegura que ha visitado en varias ocasiones las obras de La Bohemia «y no me sorprende en absoluto que se amplíen los plazos, porque la obra es enorme y, lógicamente, era complicado cumplir con las fechas que se habían dicho». Belderrain considera que «dada la envergadura del Palacio de Justicia, prefiero que lo hagan despacio, para que todo salga bien, y no que se apure la obra y que luego haya que hacer remates después de la entrega de la obra». La decana de los procuradores destacó que «el Principado ha sido muy respetuoso y nos ha tenido muy al tanto del avance de los trabajos». No obstante, reconoció que la Consejería de Justicia no ha sabido darles un plazo para el inicio de la actividad en la nueva sede y destacó que, más allá de la mudanza, «hay un engranaje más complejo, porque el traslado coincidirá con la implantación de la Nueva Oficina Judicial», el nuevo sistema de organización de los juzgados que ya funciona en otros partidos judiciales.
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