16.09.2011V. M. Martínez-Vares/ José Mª López Agúndez1
Es el área judicial donde más crece las investigaciones. Cándido Conde-Pumpido se despide del cargo en la apertura del año judicial. Por primera vez en 28 años no asisitió al acto el Rey Juan Carlos I.
Un acto sobrio y descafeinado, que destacó por la ausencia histórica de el Rey Juan Carlos I –algo que no ocurría desde hace 28 años– y la despedida del Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido. Los tribunales iniciaron ayer el curso, aunque se trató de un comienzo sui generis, si se tiene en cuenta que faltan únicamente dos meses para las elecciones generales.
Conde–Pumpido enarboló las bondades del fiscal instructor –recogido en el proyecto de Ley de Enjuiciamiento Criminal– y declaró que el Ministerio Fiscal está "listo" para que funcione ese nuevo modelo en el futuro. "Un fiscal concebido como factor vertebral del Estado de Derecho", señaló.
También destacó "la tendencia al descenso del número de procedimientos penales", un 5,82% menos, aunque el número de procesos abiertos por delito ascendió a casi 4,5 millones, cifra que sigue reflejando "un índice de litigiosidad absolutamente desproporcionado tanto respecto de la propia realidad criminológica de España como de la actividad procesal de los países de nuestro entorno".
Por otro lado, el Fiscal General resaltó cómo en 2010 "aumentaron los procedimientos por estafa, blanqueo de capitales y falsedades, así como los relativos a delitos contra la Hacienda Pública y la Seguridad Social, que son los que, con un 40,87% registran un incremento más acusado".
Defraudación tributaria
En este sentido, la Memoria del Ministerio Fiscal también apunta que los expedientes relativos a las defraudaciones tributarias subieron un 11,73%. Sin embargo, se mantiene estable el número de nuevas diligencias por delitos de fraude de subvenciones, que suman 35 en cada uno de los dos últimos ejercicios.
El presidente del Tribunal Supremo y del Consejo del Poder Judicial, Carlos Dívar, abogó porque en un futuro exista un "diálogo" entre el Tribunal Supremo y el Constitucional. Aunque apuntó que este planteamiento debe apoyarse en el respeto por parte del Supremo de las decisiones del Constitucional, también incidió en que "al mismo tiempo", el TC debe "reconocer" la jurisprudencia del Supremo, ya que refleja la "expresión de la realidad viva del Derecho".
Según Dívar, en 2010 se ha producido "una apreciable reducción del número de asuntos pendientes" en el Supremo. Actualmente, la cifra asciende a 24.225 asuntos. También calificó de "normalidad" la duración media de los procesos en las diferentes Salas, si bien la Tercera es la que cuenta con la más elevada, 17,5 meses.
Agilización procesal
En este sentido, apuntó que la aplicación de la ley de medidas de agilización procesal, que fue aprobada el miércoles en el Pleno del Senado, "tendrá una positiva influencia en el funcionamiento de varias salas del Supremo".
El presidente del Tribunal Supremo también hizo una mención, si bien no muy extensa, a la situación ya conocida de la "limitación de medios puestos a disposición de los tribunales por las administraciones competentes".
En este sentido, resaltó "la dificultad para poner en funcionamiento órganos judiciales de nueva creación, sedes que permitan acoger dignamente los tribunales y sus oficinas o la renovación de material obsoleto, entre otros".
Al hilo de esta realidad, Dívar sí quiso destacar que se ha dado un impulso legislativo relevante de cara a la futura modernización. Tanto Dívar como Conde-Pumpido hicieron referencias expresas en sus discursos en el sentido de desear la pronta recuperación de Su Majestad el Rey.
La relación entre la crisis y el fraude fiscal es real
Los datos recogidos en la memoria de la Fiscalía General del Estado muestran que en un contexto de crisis económica rebrota el fraude fiscal. Así lo explica a EXPANSIÓN Francisco de la Torre, portavoz de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE). La prueba es el incremento de la incoación de procedimientos penales relacionados con el delito fiscal.
Este experto recuerda el trabajo que desarrollan los inspectores de Hacienda, "eficaz y riguroso". Asimismo, resalta el hecho de que el Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido, "haya reconocido la relación entre fraude y crisis, que el Ministerio de Economía había negado". Por otro lado, De la Torre también reseña que "en el incremento de los casos ha influido el endurecimiento del criterio a la hora de denunciar por parte del Ministerio Fiscal". Hay que apuntar, por otra parte, que la memoria de la Fiscalía General del Estado recoge una amplia y diversa información relacionada con el ámbito penal.
Y precisamente, con actuaciones relacionadas con tipos delictivos no económicos, se ha detectado un descenso de los comportamientos presuntamente criminales. En este sentido, el fiscal general Conde-Pumpido explicó ayer que "el descenso de algunos delitos no comporta una reducción del esfuerzo del fiscal y del conjunto de la Justicia". Esto se observa en que "pese al significativo retroceso de los delitos más comunes, en 2010 el Ministerio Público formulase 305.610 acusaciones, sólo un 1,08% menos que el año anterior".
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